Un ejemplo curioso del fenómeno de reactividad cruzada es el conocido como síndrome de látex-frutas, que relaciona la alergia al látex con ciertas frutas como el plátano, el kiwi, el aguacate o la castaña y se debe a la presencia de proteínas homólogas entre ellos— cabe recordar que el látex es un derivado de la goma vegetal. Así pues, cuando una persona está sensibilizada a un alérgeno, su sistema inmunitario puede reaccionar de igual modo al encontrarse con otro parecido.