Las personas con alergia al veneno de abejas y/o avispas están en riesgo de sufrir reacciones graves en caso de picadura. Existen vacunas específicas que previenen el riesgo de reacciones graves en caso de nuevas picaduras, y se recomienda administrarlas siempre en un centro hospitalario. La duración del tratamiento suele ser de 5 años, aunque siempre debe personalizarse en función del tipo de reacción y el riesgo de sufrir nuevas picaduras, por lo que en ocasiones puede prologarse durante más tiempo.